La realidad nos muestra que la sociedad va
cambiando, las ciudades van creciendo y los espacios públicos se van
modificando, el parque automotor se incrementa cada día y los vehículos se han
apoderado de las calles, en las cuales circulamos todos ya sea como peatones,
pasajeros o conductores. Los más pequeños, son los más indefensos y por ello
circulan por las calles con el acompañamiento de los adultos, pero en algún
momento ellos también serán adultos y evidenciarán el comportamiento ciudadano
que han recibido de los mayores.
Considerando esto, todos somos conscientes que el
conocimiento temprano del espacio vial, de las normas que lo regulan y de una
actitud de respeto, responsabilidad y compromiso, son los grandes requisitos
con los que todo ciudadano debe contar, sólo así podremos construir un espacio
público más seguro...
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